Recientemente, en nuestra empresa de fontaneros profesionales, un cliente nos pidió que usáramos tuberías y accesorios de hierro negro en lugar del acabado galvanizado normal.
La galvanización es un tratamiento que se aplica al acero para darle mayor resistencia a la corrosión, de forma que los tubos de hierro más utilizados en hidráulica son galvanizados.
El uso de tuberías para la fabricación de muebles.
Como se ha mencionado anteriormente, el tratamiento, que consiste en añadir una capa de zinc al hierro, está diseñado para canalizar las tuberías para protegerlas de la corrosión, pero desde hace algún tiempo estas tuberías y sus accesorios se han utilizado para muchas otras cosas. Véase, por ejemplo, el ejemplo:
Como se puede ver, el uso de accesorios hidráulicos da mucho juego, para una multitud de aplicaciones decorativas o totalmente funcionales. Así que no es extraño que alguien nos diga, como fue el caso, que estas piezas tengan un acabado diferente al de la producción.
¿Cómo envejecer o ennegrecer los tubos y accesorios ya galvanizados en fábrica?
Para responder, o intentar responder, a la sugerencia de la que hablábamos al principio, empezamos a buscar en Internet fórmulas para oxidar los metales galvanizados, y encontramos mucha información, no es difícil hacerlo. Sin embargo, nos dimos cuenta de que nuestro cliente no quería oxidarse exactamente, sino ennegrecerse, y no encontramos ninguna información al respecto, por lo que debimos haberla suministrado nosotros mismos, si hubiera sido posible ennegrecer un tubo de hierro galvanizado.
Comentando entre nosotros sobre este tema, Félix, el jefe del almacén, propuso un experimento que le pareció útil porque, según nos cuenta, hace algún tiempo, las bobinas de este material se apilaban junto a la estantería de productos para el mantenimiento de la piscina. ¿Qué pasó después de un tiempo?
De hecho, las bobinas o bien perdieron su recubrimiento de zinc o bien comenzaron a hacerlo, para ser más precisos.
El problema es que necesitábamos un proceso rápido; combinarlo con estos productos químicos podría darnos el resultado que esperábamos, pero habría sido lento (semanas, incluso meses).
Así que decidimos poner gránulos de dicloro (se puede ver el producto aquí) en un recipiente que contiene agua, y sumergir un serpentín para ver qué pasaba.
Lo hicimos, pusimos dos litros de agua en un cubo y diluimos 100 gramos de dicloro. Luego empapamos una bobina de 1/2″ y esperamos 48 horas.
Precauciones a tomar:
Si decide probar esta técnica, debe tener en cuenta que este tipo de producto químico emite vapores nocivos, esta decoloración debe realizarse en un ambiente bien ventilado, si es posible al aire libre.